Causas de los tumores orbitales
Muchos tumores orbitales se producen por una combinación de factores genéticos y ambientales. A continuación se enumeran algunas causas de los tumores orbitarios.
- Metástasis del cáncer
Aunque algunos tumores orbitales son primarios, es decir, se desarrollan a partir de la propia órbita, algunos tumores de la órbita comienzan en otros lugares, como el pulmón, la próstata, el seno o la piel. Estos tumores luego se propagan (hacen metástasis) a la órbita. - Exposición a la radiación
Aunque la radiación se utiliza para tratar algunos tumores orbitarios, la exposición previa a la radiación también puede aumentar las posibilidades de desarrollar cánceres de la glándula lagrimal y algunos sarcomas.
Signos y síntomas
Los cánceres de la órbita se presentan típicamente de una de las pocas maneras, debido a que la órbita es como una caja cerrada. Los crecimientos dentro de la órbita causan presión en el ojo y los músculos del ojo, lo que lleva a algunos síntomas comunes.
- Abultamiento del globo ocular.
- Enrojecimiento del ojo.
- Visión borrosa o doble.
- Hinchazón, enrojecimiento o edema del párpado.
- Obstrucción nasal o dolor, presión o infección en los senos nasales.
- Cambio o pérdida del sentido del olfato.
- Sangrado de la nariz, normalmente sólo de un lado.
Cuando los cánceres en esta área crecen, los síntomas dependen de las estructuras cercanas involucradas, y pueden incluir más síntomas y el empeoramiento de cualquiera de los problemas mencionados.
- Una masa que sale de la nariz.
- Pérdida de visión.
- Entumecimiento en parte de la cara o los dientes.
- Dientes sueltos.
- Infección cerebral.
- Dolor facial o de cabeza.
Es importante saber que un paciente puede tener uno o más de estos síntomas pero NO tener un tumor orbital. Hay varias causas no cancerosas de los mismos síntomas. Por eso es especialmente importante ver a un especialista.