Si usted o un ser querido ha sido recientemente diagnosticado con cáncer o ha habido un cambio en la enfermedad o en el tratamiento puede estar pensando "¿Cómo se lo digo a mis hijos?"... "¿Qué les digo?" ...o incluso... "¿Les digo?"
Hablar con sus hijos sobre temas difíciles es difícil. Es importante ser honesto. Sin embargo, seguir el ejemplo de su hijo sobre lo que es importante para ellos puede ayudarle a saber qué y cuánto decirle a sus hijos. Crear un espacio en el que los niños y los adolescentes puedan sentirse apoyados, amados y libres de hacer preguntas puede ser tan simple como dar un paseo juntos, jugar un juego o acurrucarse en el sofá.
Consejos para mantener conversaciones difíciles pero importantes con sus hijos
1. Sea honesto y siga las indicaciones de su hijo
Decirle la verdad a tus hijos les ayuda a confiar en que tú y otros adultos en su vida serán honestos, no importa cuán difícil sea el tema. Ofrezca información de forma gradual y acepte sus preguntas. Use sus preguntas como guía para saber cuánto, qué y cuándo debe continuar la conversación.
2. Hable con sus hijos
Elija momentos no amenazantes para hablar de temas difíciles o emocionales. Elija momentos que ofrezcan a los niños una salida si la conversación llega a ser demasiado. Salir a caminar, leer un cuento o durante una actividad tranquila son momentos que permiten a los niños la oportunidad de dar un paso atrás en la conversación para pensar en lo que se ha dicho y comenzar a procesar la información.
3. Permita que sus hijos procesen a su ritmo
Cuando hable con sus hijos, no se sorprenda si no responden o reaccionan de inmediato. Los niños necesitan la oportunidad de digerir información difícil. Déles ese tiempo y luego vuelva a él y pregúnteles si tienen alguna pregunta.
En esta entrevista, Larry cuenta cómo reveló la verdad de su diagnóstico de cáncer de células escamosas en estadio 4 a sus hijos pequeños. Su hijo mayor, Jaime, sorprendió a Larry con su respuesta. Es natural que los padres quieran ocultar a sus hijos todo lo que puedan. Pero, en algún momento, se contará toda la historia.
4. Confía en ti mismo
Usted conoce mejor a sus hijos y sus fortalezas. Confíe en sus instintos cuando proporcione información nueva y/o difícil. Aunque no pueda protegerlos todo el tiempo, puede ayudarlos a aprender las habilidades que necesitan para enfrentar nuevos desafíos.
El viaje del cáncer para los padres
¿Cómo le dices a tu hijo que alguien cercano tiene cáncer? ¿Qué le dices sobre los tratamientos o el pronóstico? Aquí tienes algunos artículos que pueden ayudarte.
5. Confíe en la capacidad de su hijo para entender y afrontar la situación
Los niños son increíblemente resistentes. Tienen confianza en las lecciones que ya han aprendido y la capacidad de aplicarlas a una nueva situación.
6. Seguir hablando
La enfermedad es un proceso. A medida que continúa cambiando y tu familia con ella, asegúrate de que todos se siguen comunicando. Es posible que los niños necesiten que se les reitere la información a medida que crecen y se desarrollan o que surjan nuevas informaciones y tratamientos. Aproveche estas oportunidades para hablar y reflexionar, apoyando el crecimiento y la capacidad de recuperación de sus hijos.
Hacer un escudo familiar
La creación de un escudo familiar puede ayudar a todos a identificar los puntos fuertes de cada persona de la familia y/o lo que hace especial a su familia.
