Serología (análisis de suero sanguíneo)

La serología, también conocida como análisis de suero sanguíneo, puede determinar los niveles de biomarcadores relevantes en la sangre. Los biomarcadores proporcionan información sobre la presencia de una enfermedad.

Aunque la serología se utiliza con menos frecuencia para los cánceres de cabeza y cuello que para otras formas de cáncer, ofrece ventajas para el diagnóstico y el seguimiento del cáncer nasofaríngeo y de tiroides. Estos cánceres tienen biomarcadores únicos asociados a su presencia. El control de los niveles de estos biomarcadores relevantes a lo largo del tratamiento puede permitir al médico determinar el estado del cáncer.

Biomarcadores del cáncer de nasofaringe

En cáncer de nasofaringeLos médicos pueden solicitar análisis de sangre para comprobar la presencia de Virus de Epstein-Barr (VEB)que suele estar asociado a los cánceres de esta región. Se puede medir tanto el ADN del virus como los anticuerpos contra el virus producidos por el sistema inmunitario del paciente. Estos análisis de sangre pueden utilizarse para la detección del cáncer nasofaríngeo, así como para el seguimiento de la respuesta del organismo al tratamiento y la vigilancia después del mismo. 

Biomarcadores del cáncer de tiroides

Durante el diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento de cáncer de tiroidesLos pacientes probablemente se someterán a muchos análisis de sangre para medir los niveles de varias hormonas y proteínas diferentes. Los resultados de estas pruebas ayudan a los médicos a entender el progreso de la enfermedad y a determinar las soluciones adecuadas. A continuación encontrará una lista de biomarcadores relevantes para el cáncer de tiroides, específicamente.

Niveles de la hormona estimulante de la tiroides (TSH)

  • La TSH es una hormona producida en el cerebro por la glándula pituitaria. Desempeña un papel en el mantenimiento del equilibrio hormonal y en la estimulación del crecimiento del tejido tiroideo.
  • Los niveles de TSH son muy importantes para controlar todos los tipos de enfermedades de la tiroides.

La TSH es una hormona producida por la glándula pituitaria en el cerebro. Estimula el crecimiento del tejido tiroideo y da señales a la glándula para que absorba más yodo y produzca más hormona tiroidea. La TSH regula la glándula tiroidea para mantener el equilibrio hormonal.

Cuando un paciente es diagnosticado por primera vez con un nódulo tiroideo, generalmente en imágenes, sus niveles de TSH serán revisados para determinar si están altos, bajos o normales. Si los niveles de TSH de un paciente son altos o normales (y el nódulo tiene características sospechosas en el ultrasonido), es probable que el paciente se someta a una biopsia. Si los niveles de TSH del paciente son bajos, se someterá a una exploración de captación de RAI. 

Los niveles de TSH se miden generalmente a las 3-4 semanas después de la cirugía para evaluar la cantidad de reemplazo de hormona tiroidea que el paciente necesitará después de la cirugía. Es esencial encontrar la dosis correcta de sustitución de la hormona tiroidea después de la cirugía. El tratamiento con hormona tiroidea es importante por dos razones principales. En primer lugar, dado que se ha extirpado una parte o la totalidad de la glándula tiroidea, esta terapia ayuda a restablecer los niveles de hormona tiroidea en el organismo. En segundo lugar, la terapia con hormona tiroidea mantiene bajos los niveles de TSH, lo que ayuda a reducir el riesgo de recurrencia de la enfermedad. La supresión de la TSH forma parte de la estrategia posterior al tratamiento de los pacientes con cáncer de tiroides que se utiliza para evitar el crecimiento de cualquier célula cancerosa tiroidea residual y prevenir la recurrencia. Aprenda más sobre la supresión de la TSH.

La TSH se controlará periódicamente (cada 3-6 meses) después del tratamiento inicial para evaluar si la dosis actual de hormona tiroidea es adecuada para el paciente. 

Niveles de tiroxina libre (T4)

La glándula tiroidea produce T4, que regula el metabolismo y otras funciones corporales. Los niveles altos de T4 indican una tiroides hiperactiva, mientras que los niveles bajos indican una tiroides hipoactiva. La desregulación de los niveles de T4 es común en los cánceres de tiroides.

Niveles de tiroglobulina (Tg)

La tiroglobulina (Tg) es una proteína que se encuentra en el tejido tiroideo y que es un ingrediente esencial para la producción de hormonas tiroideas. Normalmente, la Tg disminuye significativamente en los pacientes después de una tiroidectomía total y un tratamiento con RAI. Por lo tanto, cualquier elevación de los niveles de Tg después del tratamiento se considera un indicador de recurrencia o progresión de la enfermedad. Un aumento de los niveles de Tg indicará a los médicos que soliciten estudios diagnósticos adicionales, y puede significar que será necesario un tratamiento adicional. Inicialmente, la Tg sérica debe medirse cada 6-12 meses, o con mayor frecuencia si se trata de un paciente de alto riesgo.

Los niveles de Tg 3-4 semanas después de la cirugía se utilizan generalmente para predecir la recurrencia de la enfermedad, y para decidir si es necesario un tratamiento adicional con RAI. 

Niveles de anticuerpos de tiroglobulina (TgAb)

El anticuerpo contra la tiroglobulina (TgAb) puede reaccionar con la Tg en la sangre. Debido a estas interacciones, los niveles altos de TgAb pueden producir resultados inexactos de los niveles de Tg. Los resultados inexactos de los niveles de Tg en el laboratorio pueden interferir con el diagnóstico del médico sobre la recurrencia o la progresión de la enfermedad. Es importante medir estos niveles simultáneamente para asegurar una evaluación completa de los resultados.

Los niveles de TSH, Tg y TgAb serán medidos al mismo tiempo para permitir a los médicos evaluar los resultados con precisión. 

Si Cáncer medular de tiroides (MTC) se sospecha preoperatorio, los médicos pueden ordenar análisis de sangre adicionales, específicamente para la calcitonina y el antígeno carcinoembrionario (CEA). Un nivel de base de estos marcadores sanguíneos será examinado antes del tratamiento, y tanto los niveles de calcitonina como de CEA serán monitoreados durante y después del tratamiento.

Niveles de calcitonina

Las células C (células parafoliculares) se encuentran en la glándula tiroides y producen la hormona calcitonina. La función de la calcitonina es ayudar a regular los niveles de calcio y fosfato en la sangre. Los niveles elevados de calcitonina pueden indicar al médico que algo es anormal. Normalmente, el aumento de los niveles de calcitonina se asocia a cáncer medular de tiroides (MTC) porque se origina en las células C.

Niveles de antígeno carcinoembrionario (CEA)

El antígeno carcinoembrionario (CEA) es un marcador sanguíneo que suele estar presente sólo durante el desarrollo fetal, pero cuya producción desciende hasta casi cero antes del nacimiento. En los adultos sanos, los niveles de CEA en la sangre son extremadamente bajos. Sin embargo, se ha demostrado que los niveles de CEA en sangre aumentan en ciertos tipos de cáncer, especialmente en Carcinoma medular de tiroides.