Los padres y los cuidadores son los que mejor conocen a sus hijos. Ser honesto con sus hijos es muy importante para su capacidad de recuperación, para hacer frente, para entender y para aprender. A continuación se presentan algunas pautas de desarrollo que deben tenerse en cuenta cuando se piensa en cómo compartir un diagnóstico y un tratamiento con los niños.
Infancia temprana (3-6 años)
Los niños pequeños son pensadores mágicos y en ausencia de información llenarán los espacios en blanco con su propia imaginación y conocimientos limitados. A menudo, los niños en edad preescolar pensarán que ellos causaron la enfermedad. Ser honesto y aclarar los conceptos erróneos enseña a los niños que usted confía en ellos y ellos pueden confiar en usted. Los niños de 3 a 6 años tienen muy poco conocimiento de lo que significa el cáncer o de lo que es. Es importante definir la palabra al menos una vez.
El viaje del cáncer para los padres
¿Cómo le dices a tu hijo que alguien cercano tiene cáncer? ¿Qué le dices sobre los tratamientos o el pronóstico? Aquí tienes algunos artículos que pueden ayudarte.
Infancia media (7-12 años)
Los niños en este rango de edad a menudo han tenido alguna exposición al cáncer ya sea a través de un miembro de la familia, lo han visto en un programa de televisión o en línea. Es importante explicar qué es el cáncer, pero también hacer distinciones sobre el tipo específico tuyo o de un ser querido. No todos los cánceres son iguales, el tratamiento y los resultados son diferentes para cada tipo. El uso de libros, imágenes y experiencia práctica ayuda a este grupo de edad a crear un puente entre lo que saben y lo que no saben.
En esta entrevista, Larry cuenta cómo reveló la verdad de su diagnóstico de cáncer de células escamosas en estadio 4 a sus hijos pequeños. Su hijo mayor, Jaime, sorprendió a Larry con su respuesta. Es natural que los padres quieran ocultar a sus hijos todo lo que puedan. Pero, en algún momento, se contará toda la historia.
Adolescencia (13+ años)
Es muy probable que los adolescentes tengan algún conocimiento previo sobre el cáncer y su tratamiento. Lo que necesitan es honestidad y comprensión. Proporcionar información sobre el tratamiento de diagnóstico y las formas en que pueden apoyarle. Hacer saber a los adolescentes que usted confía y los respeta ayudará a crear un espacio para la comunicación abierta y honesta sobre cómo se sienten y las formas en que pueden ayudar.
Separar la verdad del mito
Hay mucha información sobre el cáncer, pero ¿es verdad? Junto con un amigo o un miembro de la familia, piensa a quién le pides que obtenga la información correcta.