El tiroides es una glándula con forma de mariposa situada en el cuello. Se encarga de producir hormonas tiroideas (también conocidas como T3 y T4), que ayudan a regular el metabolismo, la temperatura corporal y el buen funcionamiento de muchos otros órganos, como el cerebro y el corazón. El hipotiroidismo se produce cuando la producción de hormonas tiroideas no alcanza el umbral normal.
¿Qué es el yodo y qué relación tiene con el hipotiroidismo?
El yodo, un mineral esencial, es un componente clave en la producción de la hormona tiroidea. Las células tiroideas convierten el yodo en las hormonas tiroideas T3 y T4. De este modo, la falta de yodo puede causar hipotiroidismo (lea nuestro artículo sobre el hipotiroidismo para conocer los síntomas). Dado que el cuerpo no puede producir yodo de forma natural, éste debe incorporarse a la dieta. Un adulto medio suele necesitar 150 mcg de yodo al día.
Los grupos de riesgo de carencia de yodo son las mujeres embarazadas, los veganos y los vegetarianos, y las personas que viven en zonas con bajos niveles de yodo en el suelo. Un simple análisis de orina puede detectar la carencia de yodo.
8 alimentos ricos en yodo
La incorporación de yodo en su dieta habitual puede corregir fácilmente una deficiencia de este mineral.
1. Huevos
Un solo huevo duro puede aportar unos 26 microgramos (mcg) de yodo.
2. Algas marinas
Una ración de 10 gramos de alga nori seca (la que se utiliza en el sushi) puede contener hasta 232 mcg de yodo.
3. Bacalao
Una sola ración, o 3 onzas de bacalao, contiene unos 158 mcg de yodo, lo que satisface la ingesta diaria recomendada para la mayoría de los adultos.
4. Sal de mesa yodada
Poco más de media cucharadita de sal yodada puede cubrir la ingesta diaria de yodo de un adulto: contiene unos 150 mcg.
5. Queso
La mayoría de los quesos contienen yodo, aunque la cantidad exacta varía según el tipo. Por ejemplo, una onza de queso cheddar contiene 12 mcg de yodo, lo que representa el 8% de las necesidades diarias.
6. Yogur
El yogur no sólo es rico en calcio y proteínas, sino también una valiosa fuente de yodo. Una taza de yogur natural descremado contiene 75 mcg de yodo, lo que equivale a 50% de las necesidades diarias. El contenido de yodo del yogur con sabor a fruta varía en función de los niveles de yodo de la leche utilizada para producirlo.
7. Leche
Una ración de 8 onzas de leche desnatada aporta 56 mcg de yodo, lo que supone 37% de los 150 mcg diarios recomendados para adultos sanos. La leche desnatada, con 51 mcg, tiene algo menos de yodo que la leche semidesnatada. La leche entera y la leche con chocolate también contienen yodo.
8. Gambas
Las gambas y otros mariscos son excelentes fuentes de yodo, ya que absorben el yodo que se encuentra de forma natural en el agua de mar. Tres onzas de gambas aportan aproximadamente 35 mcg de yodo, lo que equivale a 23% de la ingesta diaria recomendada.
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